Cómo tener más intimidad y volver a enamorarme de mi esposo después de 20 años de casados

Minerva y Julián han estado casados ​​por más de veinte años y tienen una hija juntos. Aunque existe una buena comunicación entre ellos, Julián se ha encontrado hace poco, con un problema que Minerva no vio venir. Ya no se siente amado en su matrimonio, porque apenas hay intimidad. Ella no sabe cómo resolver ese problema y me ha pedido que le pida a mis lectores algo de ayuda.

"Él piensa que ya no estoy enamorada de él, cuando eso no es cierto"

No tengo problemas con Julián

Ella empezó diciéndome “Mi esposo Julián es maravilloso”. “Es mi mejor amigo, mi mayor apoyo, un gran esposo y un gran padre. 

Pero durante los últimos años él se ha encargado de la mayoría de las tareas del hogar, porque tengo un trabajo que exige mucho de mí. Y nunca se ha quejado de eso. Tenemos una hija de 11 años con la que tiene muy buena relación. Van juntos a andar en patinete casi todas las noches, él le enseña a dibujar y escuchan mucho la misma música. 

Julián todavía tiene citas conmigo y, a veces, nos vamos juntos los fines de semana a un restaurante. Tenemos un matrimonio exitoso y hemos estado juntos durante aproximadamente la mitad de nuestras vidas.

Pero ha llegado a un problema a nuestras vidas

No se puede decir que entre ellos falta comunicación, porque Julián y Minerva lo están haciendo muy bien. “Podemos hablar de cualquier cosa y realmente escuchar lo que la otra persona tiene que decir. También siempre tratamos de hablar desde 'Siento esto' en lugar de acusarnos mutuamente de algo”, me escribe Minerva. 

Todo eso suena genial, pero hay algo que duele. “Hace unos días, Julián de repente inició una conversación para comunicarme que no se siente amado. Estaba bastante sorprendido. Explicó que principalmente tiene que ver con el aspecto intimo de nuestra relación. Casi todas las veces que quería tener intimidad, me negaba porque estaba agotada por mi trabajo".

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Necesita un consejo que realmente le ayude

Minerva escuchó toda la historia de Julián e inmediatamente se dio cuenta de que tenía razón. “De hecho, ha habido mucha menos intimidad de la que me gustaría y eso es por mi culpa. De alguna manera ya casi nunca tengo ganas. Él está convencido de que ya no estoy enamorado de él, pero ese no es el caso en absoluto. Todavía me gusta tanto como cuando nos casamos hace más de veinte años. 

¿Qué puedo hacer para asegurarme de que haya más intimidad en nuestra relación y que este problema se resuelva?”. ¿Qué le aconsejarías a Minerva?